A dos semanas de que 232 personas perdieran la vida en la discoteca Jet Set de Santo Domingo; su gerente, Antonio Espaillat, concedió una entrevista; en la cual admitió que el techo del lugar nunca fue inspeccionado. En el lugar falleció el merenguero Rubby Pérez, figura querida internacionalmente.
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En una conversación exclusiva con la periodista dominicana Edith Febles, en el programa dominicano El Día, transmitido por Telesistema, canal 11; el ejecutivo comentó que se encontraba en Las Vegas, en una convención, al momento de enterarse de la tragedia.
Refirió que su hermana, quien quedó bajo los escombros la madrugada del 8 de abril cuando el techo se desplomó, fue quien le avisó. Durante la conversación de más de una hora, Espaillat dijo que es «el primer interesado en saber qué pasó. Tenía una preocupación tan grande por saber qué había pasado. Corrí al aeropuerto para volver».
A las 3:00 pm llegó a la capital dominicana y, desde entonces, «aquí estoy», aseguró; al tiempo que también afirmó que nunca fue alertado por nadie sobre alguna falla. «De haberlo sabido, habría tomado las medidas. El techo no recibió inspección jamás».
En cuanto a los testimonios que aseguraron que desde hace tiempo se desprendían pedazos del techo; el gerente del Jet Set señaló que eso era debido a filtraciones hacia los plafones de yeso. «Nosotros teníamos plafones de yeso que recibían el agua que se condensaba, se tapa de los aires. Mi propio personal se encargaba de cambiarlos».
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Asimismo, también dijo que desde que la familia compró el lugar hace 30 años, el mismo ya tenía filtraciones. Originalmente, el sitio era un cine. Su madre, quien figura como presidenta de la compañía que lo compró, lo adaptó para centro nocturno.
Reconoció que las fotos aéreas que se revelaron luego del colapso son ciertas; pero que «no puedo hablar de peso. Nunca tuve información de peso. Las personas que contratamos nunca me hablaron de eso». También negó que las cornetas y luces que guindaban del techo «no pesaban».
Afirmó igualmente que las cinco puertas del lugar no estaban cerradas por fuera. Algo que contrasta con la versión dada, entre otros, por la hija de Rubby Pérez; quien en varias entrevistas señaló que, tanto ella como otros músicos, trataron de salir por la puerta de la tarima y estaba cerrada. «Comenzamos a golpear fuertemente, hasta que alguien que estaba afuera oyó y quitó el pestillo», dijo Zuleika Pérez en su testimonio.
Le aseguró a las familias que «hará frente a todo. Cuántas cosas quisiera hacer y no he podido ni empezar, Pero lo importante es que estoy aquí y todo lo que pueda hacer, lo voy a hacer».
También señaló que habló con la familia de tres afectados; dos de ellos, fallecidos. «Y me han manifestado que no van a demandarme».
Puede ver la entrevista completa con Antonio Espaillat, gerente de Jet Set, aquí.
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